Foto propia |
Cuando me enteré por la tele, lo primero que hice fue
despedirme del trabajo. Más bien hice que el cuatrojos me despidiera lanzándole
un globo de orines propios a la cara ajena. Y a la corbata de enterado. Luego me compré,
sin dinero, un coche con un billón de caballos, uno que llega antes de que
salga. Las multas me la sudan ya. Me he arreglado la boca y el cuarto de baño.
Y me he puesto tetas, algo con lo que siempre soñé. Me fui a París a soltar un
escupitajo desde lo más alto de la Torre Eiffel. Hice montar una sala de cine
en el patio, techado de uralita, donde he visto, en tres semanas encerrado, a
todos los grandes repartiendo ostias de venganza. En el sexo, lo he probado todo
con todo, el matrimonial inclusive. Siempre pagando. Estaba viviendo así, a
tope, sin que me importe lo que diga nadie, cuando me entero de que han hecho
una relectura, dicen, de la profecía esa.
Así que, ahora, con un
primo también sin novia, que es mecánico y eso, estamos inventando una
bomba con botón. Porque ya no hay marcha atrás y, por mis huevos, que los mayas
van a tener razón.
Al llamamiento de Marina de la Fuente, de No me vengas con historias, de que publiquemos un algo en nuestros blogs una hora antes del principio del fin del mundo, o sea, a la 23 horas del día 20, acudo yo con esto. Pinchando en el enlace puedes ver a todos y todas las que queremos, llegado el caso, morir disfrutando. En este caso, con la lectura.
Ese es el motivo por el cual no se sabe la fecha de la muerte, salvo si tienes hipoteca y pierdes el curro que es inmediata. Buen personaje te has definido. No obstante, sospecho que este relato ha salido sin mucho empeño, y como se va a acabar el mundo puedo decírtelo sin tapujos: Sabes escribir mejor. Jeje, nos vemos en el infierno.
ResponderEliminarAprovechar hasta el último momento, total, no vamos a salir vivos!!!! o ¿si?
ResponderEliminarUn abrazo,
Jajaja, di que sí, sí, señor. qué se han creído, ni teorías ni tonterias, en este caso los mayas van a tener razón.
ResponderEliminarMuy divertido, Miguelángel.
Besitos
Gracias, Ximens, por tu sinceridad. Y claro, a estas alturas, tú me puedes decir lo que quieras, faltaría!
EliminarEsperanza, pues fíjate que al final ha sido que sí.
Gracias, Elysa. Si te ha hecho reír, yo, requetecontento.
Abrazos para tres.
Miguel Ángel,
EliminarTe suena Ginebra, Suiza, Allex, Brasil, etc?
Si sí. Entra en contacto.
Feliz Navidad y un excelente 2013!
allexfr@hotmail.com
Jjajajajjajajajajajjajaj, qué me ahogo,jajajajajajjajaj.
ResponderEliminarOye, tampoco es mala muerte, morir de la risa.
Besos de fin desde el aire
De esos hay muchos que viven así todos los días, como si el mundo se fuese a acabar.
ResponderEliminarUn saludo
Don Flores, que magnifico dominio de la situación, si el mundo no se acaba por las buenas lo haremos por las malas. Si señor, yo no vuelvo a rebajarme a una vida que odiaba.
ResponderEliminarComo siempre unas letras frescas repletas de humor.
Felices fiestas, Don. Un abrazo.
Rosa, Rosa, a ver si lo que no han conseguido los mayas contigo lo va a conseguir este descerebrado de personaje que me ha salido!!
EliminarDe esos, Henry, y de los que creen tener mil años por delante para decidirse a hacer algo. Hay que vivir a la mitad, ni helado ni hirviendo.
Hombre, Don Nico, a ver cómo le dice a su jefe, el enterado, que lo del globito fue sin querer...
Un abrazo para cada cual.
Ahí, que después de lo invertido no me digan que no es verdad.
ResponderEliminarSiento tu voz (estilo) entre la sinrazón de este pobre hombre, que por sus trece acaba con el mundo. Si no fuera por lo de las tetas diría que es Rajoy, ¿no?
Abrazos company
¿Y quien dice que lo de las tetas descarta a Rajoy?
EliminarComo siempre Miguel Ángel así de bien. Como me río con tus textos. Saludos cordiales
ResponderEliminarFco Marcos
Buena historia Miguel Ángel. Son curiosos los deseos últimos de tu protagonista. Qué más da que no se acabe el mundo, que se declare insolvente y siga chupando que aquí lo que está mal visto es pagar.
ResponderEliminarAbrazos
Estoy con Antonia, Xesc, o es que lo has visto en pelota picá, y no nos lo quieres contar?
EliminarGracias, Francisco. El otro día pase por tu blog, pero no me pude parar mucho. Por supuesto, volveré.
De curiosos, nada, Arte Pun, quién no sueña con París, o con tetas, o con bólidos?
Un abrazo, ya con olor a turrón.
Pues lo de las uralitas es peligroso, ya sabes. Muy divertido como siempre que le das al humor (que es casi siempre).Nada, que a ver si son chapuzas y el botón solo les sirve para abrochar . ¡Hostias¡ :-)
ResponderEliminarA cabezota no le gana nadie. Si hay que acabar con el mundo, se acaba.
ResponderEliminarMe gustó mucho tu aportación.
Par de abrazos.
Jaaaaaaaaaa, eso de empezar a gastar, perdón, quise decir festejar, antes de tiempo...
ResponderEliminarDesde este mundo que sigue vivito y coleando, un fuerte abrazo
Ya, Antonia, es que este es un fuera de la ley en todo. Y su primo, un tontaina. Bomba, ni bomba...
EliminarEs que dime, tú, Lola, cómo vuelve para atrás? Qué hace con los pechos? Y con tanta película?
Eso le pasa por creer todo lo que dice la tele, Patricia.
Más abrazos, ahora con pestiños.
Jaja. Parece que se apresuró un poco en tirar la casa por la ventana. Si al final es tan cabezotas como Julius, el personaje de mi cuento.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy bueno, me ha encantado el escupitajo desde la torre parisina.
ResponderEliminarSaludos navideños.
Un micro que me trajo el recuerdo de lo que siempre decía mi abuelo cuando se disponía a hacer algo, "O va, o rompe". Me ha gustado este personaje por eso mismo, Miguelángel.
ResponderEliminarPor lo demás, hace lo que siempre he creído que deberíamos de hacer llegado ese caso; sacarnos las ganas que tengamos en el cuerpo.
Un abrazo,
Bueno, ya he visto que se dan la mano, Sara.
EliminarYolanda, yo eso lo pensaba de niño. Luego he crecido y ya no lo pienso.
Claro, imagínate la oportunidad para alguien que lo vea así de claro, Pedro. Otra cosa es que luego sea un fiasco.
Abrazos navideños (son iguales pero con villancicos de fondo)
Me encanta tu desahogo fin del mundo.
ResponderEliminarPienso que mucha gente actuaría así por tanto hartazgo, y no es para menos.
Como siempre bien escrito -magistral- eres de los amigos cuentistas,de los que más me gusta leer. (que no se moleste nadie)
Gracias siempre por venir por mi ventana, tus comentarios son sienceros, eso me gusta.
¡Ah! aprovecho para desearte felicidad todos los días del año.
Besicos
Jajaja, ¡me encanta la frase final! Y eso de lanzar orines al jefe mamón tiene que ser un gustazo... :)
ResponderEliminar¡Muchas gracias por haber participado con un micro tan gamberro! :)
muy bueno, Miguelangel, esa frase final con huevos incluidos. Avisa antes.
ResponderEliminarUn beso muy grande.
Gracias, Cabopá, me ponen sonrisa de tonto tus palabras. Jo, pues últimamente visito poco, y me da rabia.
EliminarGracias a ti, Acuática, por la iniciativa. Enhorabuena por el éxito. Y bienvenida a mi casa, me alegro que también haya servido para visitarnos.
Qué va, Elena, si esto no va lejos. Sin le pondrán un cable, pimienta, pinzas, una pila y poco más.
Abrazos para las tres.
Es lo que tiene quemar todas las naves, que ya no hay marcha atrás. No sé yo si Corea del Norte no anda también empeñada en que las profecías están para cumplirlas. Buen relato, Miguelangel.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un primo mecánico siempre viene bien, se acabe o no el mundo. Es lo que tiene cuando sabes de antemano la fecha de tu muerte... Uf, mejor no conocerla!!! Y sobre todo no fiarte de las predicciones. MiguelÁngel, yo encantada de seguir vivita y poder acercarme a disfrutar de los escritos, cuentos y reflexiones de los amigossss
ResponderEliminarAmparo M. A.
Miguelángel:
ResponderEliminarCon este mensaje un poco generalizado, lo reconozco, ya que no tengo otra forma de llegar a todos los amigos, quiero desearte Feliz Navidad.
Un fuerte abrazo.
HD
Gracias, Pedro. Y placer tenerte en casa. Una cerveza, café? Me alegro de verdad.
EliminarHombre, un a mecánico siempre es muy útil, pero no para hacer bombas, y menos con botón. Madre mía, Petra, con lo que nos queda que escribir y leer...
Feliz Navidad para ti también, Humberto. Ahora mismo voy y te lo digo en tu casa, estás?
Abrazos, buenos deseos y aguardiente para todos
Quizás sea verdad que deberíamos vivir como si el mundo se fuese a acabar mañana, aunque eso también parece peligroso, ¿no? Aunque aparentemente sencillo, el micro invita a la reflexión. Un saludo, intentaré volver.
ResponderEliminarBienvenido Ernesto. Puedes venir las veces que quieras, aunque todos sabemos que no es lo que se quiere, es lo que se puede...
ResponderEliminarUn saludo,
A mi me pasó una vez que pensé que me había ganado un viaje a un safari en Kenia Miguelángel. Anduve mirando gorros de explorador, visitando todas las tiendas de Coronel Tapioca e incluso haciendo pruebas físicas de correr delante de leones y cocodrilos porque pensé que eso no iría incluido y tampoco me iría mal, pero cual fue mi sorpresa cuando al final me enteré de que estaba equivocado y no me sirvió de nada. De safarí nada. Era una excursión en burro por la city y ellos ponían el gorrito y la camisa hortera para que la gente se partiera el culo conmigo.
ResponderEliminarFelicidades hombre, ya que no se terminó de acabar el mundo.
Un abrazo.
Me gusta el tono macarra del micro, muy conseguido. Y si se tiene que acabar, pues que se acabe ¿no? jeje
ResponderEliminarsaludillos
Vaya, me parece que esta vez paso al final del final... pero felizmente tu personaje aún no ha conseguido saltar el mundo con el cuñao. Lo que más me gusta es el desmelene, la tromba de deseos desbocados que eres capaz de exponer (¿los grandes del cine repartiendo ostias de venganza???); en tus micros se disfruta siempre de la sobreabundancia en algún sentido (fantasía, ternura, situaciones, personajes muy vivos...). Creo que es eso lo que me engancha.
ResponderEliminarBueno, que tengas muy feliz 2013. Un gran abrazo
Enmas, pero dónde vives tú para confundirlo con Kenia? Jajajaja.
EliminarPues sí, Puck, este no tiene fin, y está muy loco. suerte que de luces...
Susana, supongo que es porque soy muy exagerado, como buen andaluz que soy, como era mi madre: mejor que sobre siempre que no que falte.
Bon Any Nou a los tres. Gracias por estar estar ahí aún.
Me parece magnífico!!!!! Eres un mago de las palabras! Mil gracias, miles!!! :-)
ResponderEliminarjajajaja!!! No te puedes ni llegar a imaginar lo que me he reido, es buenísimo... Aún sigo riéndome.
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