Conocer yo a Inés Vilpi es lo mejor que le ha podido pasar a mi libro (ves, digo mi libro y, como a los niños, se me explota una burbuja en la boca). Inés ha sabido captar todo lo que no se puede decir con palabras, esa esencia que intentamos atrapar los que jugamos a escribir; e incluso los que escriben en serio. Y es que toda esa esencia de la que hablo, que está repartida por el libro, como si fuera polvo, ella la ha ido amontonando, ha puesto de su parte para convertirla en barro y lo ha moldeado hasta hacer esto: una hermosa escultura hecha de cachitos insignificantes de esencia.
Y como no podía ser de otra manera, en ella aparece el Miguelángel que fui de pequeño, rodeado de casi todas las mujeres que me alimentaron la vida en mi infancia. Digo casi porque faltaría una tía mía que vivió con nosotros, como otra hermana, madre o hija, y algunas sobrinas que crecieron a la par que yo. Quedan ahí para otro libro.
Estoy muy contento, emocionado, con la portada. Contento de que satisfaga a su autora, de que guste tanto a la editorial, al editor. A mi familia, la de sangre y la otra. Estoy contento, mucho, una contentura que no me cabe en el cuerpo; y mucho menos en esta entrada, que no es capaz de contar ni acercarse de lejos a lo que siento. Llevo tres días con una contentura infinita, que rima con Talentura.
¡Suerte, mi niño! Disfruta de tu contentura.
ResponderEliminarUn abrazo y dos besos muy contentos.
Gracias, maestra. Muchas gracias.
EliminarOtro lote para allá.
Como para no estar contento, que sientas que alguien ha sabido captar y plasmar en una ilustración justo lo que tu querías transmitir, debe ser la leche.
ResponderEliminarEstoy deseando tenerlo entre las manos.
Fuerte abrazo.
Sí, Yolanda. Estoy inmensamente satisfecho con lo que ha hecho esta mujer.
EliminarUn abrazo.
Don Flores, ya no te queda nada y esta portada es solo el anticipo a todo un libro con mucho arte.
ResponderEliminar¡Enhorabuena otra vez!
Espero que te animes a presentarlo en Valencia y sino fuese posible, ya le pediría el libro a los Reyes Magos.
Un fuerte abrazo, Don.
Hombre, es seguro que bajaré por Valencia. Y más teniendo tanta tanta gente a la que quiero por allí, Don.
EliminarUn abrazo gordo.
¡Enhorabuena, mi Miguelángel querido!
ResponderEliminarAún suena en mi memoria nuestra charla de mayo acerca de esta alegría, aún soy capaz de ver el brillo de tus ojos y sentir esas burbujas de alegría que explotan en tu boca.
Me alegra, y mucho, tu felicidad.
Un abrazo lleno de ganas de leerlo.
Y no creas que no he pensado veces en todo lo que me decías. Ese día, tanto tú como Mar Horno, me distéis las primeras nociones para lo que se avecinaba, y ya empiezo a emplearlas. Totalmente agradecido, Pedro.
EliminarUn abrazo con mucha apreteura.
Desde hace un tiempo no contesto a los mensajes por aquí, como debiera. Pero no es que no los lea, los leo y casi me los tiro por encima de gusto. Me falta tiempo, como a todos supongo. Por eso me limito a daros las gracias o comentaros por FB, o yendo a visitaros, y así de paso me pongo al día de lo vuestro, para agradeceros la visita.
ResponderEliminarGracias, a borbotones, por seguir seguir visitando esta, que es como vuestra.
¡Qué bien! La portada es preciosa, atraerá. El título dice mucho, todo aquello que te llega como la lluvia de amor de los tuyos. Espero tenerlo pronto.
ResponderEliminarMiguelángel,
ResponderEliminarnos alegramos como si fuera nuestro! Eres entrañable y te quiere mucha gente. Encima tienes talento. Adelante. Y a ver si nos vemos en Alemania con una presentación de tu libro.
Ua, qué nervios, ganas hay ya de tenerlo entre las manos. Lujazo de portada.
ResponderEliminarAbrazos.
Yo te puedo vender 5 o 6 pero a comisión :-P
ResponderEliminarSi eso lo negociamos.
Ahora mismo no sé decirte si soy tú o ello, pero lo más probable es que sea yo, no sé ya.
Que eres muy eso, o sea genial. Un abrazote.