Foto Casera |
Si alguien se hubiera decidido a abandonar la mesa, acercarse y felicitarle también el año, enseguida habría notado algo extraño
en su cara. Y habría sabido, casi seguro, interpretar al momento ese parpadeo
repentino y acelerado de sus ojos, ese boqueo de pez sin agua, de labios sin
aire. Habría captado, sin duda, el brusco cambio de actitud corporal del adolescente
impasible, de nariz desproporcionada y flequillo demasiado largo, siempre
adherido al sofá. Quizá entonces, un golpe seco a tiempo entre los omoplatos,
una sacudida de hombros, un grito desmesurado, una brusca compresión en el
abdomen habría bastado para rescatarlo de esa vereda sombría y sin retorno,
recién emprendida al llegar la duodécima campanada. Y probablemente, después de
ese día, en esa casa continuarían consumiéndose las uvas, como postre durante
todo el invierno y como rito de la buena suerte en noche vieja.
Relato con el que participé en Esta Noche Te Cuento en el mes de diciembre. El tema era "Tras las campanadas de fin de año".
ENTC es un concurso anual en el que mi relato DELIA LUNERA se ha colado como uno de los DOCE finalista de 2014. El 28 de Febrero se conocerá el fallo final del concurso. Diosito, qué nervios!
Un microrrelato impecable. Bien llevado desde principio a fin. Mi enhorabuena.
ResponderEliminarTres abrazos y un beso.
Hola Miguelángel, ya tengo en mi poder tu libro. Lo paladeo poco a poco como quien deshace un bombón en su boca, disfruto leyéndolo y también me entristezco, porque me lo acabaré...
ResponderEliminarEnhorabuena
Muchas felicidades. Es muy bonio tu relato.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Pues que te voy a contar ya me gustó en diciembre y me sigue gustando ahora en enero. Gustar mola amigo Miguel, suerte para este año y para este blog remodelado.
ResponderEliminarAbrazos
No te deseo suerte porque ya la tienes al tener ese talento innato que a tantos nos gusta paladear como el bombón de un comentario anterior. Los premios alegran el ego pero no ganarlos no significa desistir y mucho menos dejar de hacer aquello que más te gusta.
ResponderEliminarBesos de gofio y me ha gustado la reforma de tuespacio.
Me gusta tu Boicot, tu Delia me cautivó ya la primera vez que lo leí y este look de lunares, me ha dejao tocando castañuelas. Y es que la monotonía no es lo tuyo, ni la mediocridad ni...
ResponderEliminarUn besazo admirado, champion.
Hola Miguel Ángel, la verdad es que nunca se sabe cómo puede acabar un boicot, y por tanto sus consecuencias. Aquí se dejaron de comer uvas cuando lo que debieran haber hecho es acercarse con cariño a ese prójimo que cada vez estaba más lejano. Bueno, estoy un poco espeso para variar y no sé si tu relato admite mi falta de intelecto.
ResponderEliminarPor otro lado, me ha parecido que estabas premiado, requetepremiado o tal vez concursando, en cualquier caso, enhorabuena.
Abrazos